La ermita original con planta de cruz griega fue transformada en una torre con almenas durante el siglo XX. A pesar del intento de eliminar la coronación almenada la Comisión del Patrimonio estimó conveniente mantener la imagen heredada pero permitió eliminar el desafortunado volumen que encerraba la escalera de caracol.

El destino como Centro de Interpretación del yacimiento arqueológico y la solución de acceso a la cubierta sugirió la idea de mantener el nivel del espacio inferior diáfano con escalera escamoteable reconfigurando la parte superior para alojar el volumen de la misma.

Restauración de la fachada exterior con protección de consolidante+ tinte+impermeabilizante manteniendo la imagen.

Revestimiento interior de paramentos históricos con mortero  de cal y áridos puzolánicos y paramentos actuales con tableros de madera. Suelo de piedra de Tarifa.

Fotografías. Fernando Alda