Cubrición de la Casa Romana del Anfiteatro
Mérida

Consejería de Cultura Junta de Extremadura
Año 2004_2017

«El uso del tiempo, el tiempo propiamente humano, nace de un vacío, de un poro en el transcurrir temporal…La estructura del tiempo en el sueño es, sin poros, un tiempo compacto donde no podemos entrar, Así, en cierto modo, somos externos a lo que nos sucede; la conciencia no entra, sino que, separada, asiste»

María Zambrano

TIEMPO COMPACTO. ESPACIO SUSPENDIDO

La Casa Romana nos enfrenta a un límite incierto entre el dominio de la naturaleza y el poder fáctico del hombre. Este palimpsesto es la representación de un tiempo compacto, de un espacio comprimido, que ahora debemos manipular como parte de la propia historia.

SER. NO SER. PODER SER. LOS LIMITES DE LA RESTAURACIÓN

Mérida ha habilitado el Teatro no solo en su carácter edilicio sino en su destino funcional. El teatro representa el SER.

El Anfiteatro mantiene un equilibrio Aristotélico del PODER SER pues se mantiene pero aún no se utiliza.

Sin embargo, la Casa Romana permanecerá definitivamente en el estadio de NO SER vivienda para siempre.

La cubrición de la casa romana del anfiteatro se realiza mediante un sistema que minimiza la afección sobre el yacimiento por la reducción de apoyos constituidos por muros de hormigón adyacentes a los arqueológicos para reproducir espacios originales

La incorporación de una cubrición a la DOMUS constituye un fondo neutro, aporta una escena que se diluye para que el yacimiento arqueológico atrape la atención del visitante.

Se proyecta uno cubierta plegada, que hace enterrar el yacimiento, para formación de pendiente construida con textil soportado por retícula de aluminio y cables de acero.

Constructora UTE Carija_Grupo Ortiz y Gaptek

Los muros verticales son adyacentes a los arqueológicos y compartimentan espacialmente el ámbito de la DOMUS según las distintas partes o etapas de construcción de la misma. Son coronados con vigas de madera laminada que cubren las grandes luces y el perímetro de la cubierta.
Estos muros son de materia negro o suficientemente oscura para reducir su presencia. Todo el ambiente queda ensombrecido mediante la plantación de árboles, tanto en el perímetro como en los patios para filtrar la luz natural.

Se pretende hacer énfasis en la luz artificial, que será la que iluminará las habitaciones con mosaicos, de manera más violenta y el resto de muros con una suave luz rasante.

La protección de los mosaicos de las pisadas de los visitantes se realiza mediante una superficie ligeramente suspendida de vidrio estructural sobre pequeños apoyos.

Esta plataforma de vidrio apenas es percibida y permite la visión del mosaico subyacente, por lo que el visitante tiene la sensación de caminar sobre el mismo.