Tras la reconquista de la Villa en 1482 la Torre queda muy deteriorada y prácticamente abandonada con la pérdida del espacio y bóveda de la planta superior.

La restitución del volumen de coronación con tapial de hormigón se yuxtapone a la integración mediante técnicas históricas de las zonas en las que han mantenido un porcentaje de material suficiente.

La bóveda de madera laminada filtra una luz tamizada que nos informa de la situación histórica en la que se encontró durante 5 siglos a cielo abierto.

Cinco tipos de intervención se acumulan en las fachadas.

Restitución de sillares y tapial. Consolidación del tapial y sillería. Integración con rebaje de tapial histórico. Yuxtaposición de tapial de hormigón y acceso a la torre. Tratamiento homogeneizador al conjunto.

Fotografía. Fernando Alda